
El profesor Marrodán y Marta Quintín durante la presentación en el aula 5. Foto: Marta Lasa
Marta Quintín, licenciada en Periodismo por la Universidad Navarra, regresó ayer a la que fue su facultad hasta hace dos años para presentar su nueva novela con el título Dime una palabra. Durante su periodo universitario Marta colaboró en la revista Nuestro Tiempo y actualmente trabaja en la agencia EFE, en Nueva York. El profesor Javier Marrodán fue la persona que le acompañó durante la presentación en el aula 5 de fcom, que profesores, alumnos y exalumnos no quisieron perderse.
El profesor Marrodán reconoció no haberse sorprendido el día que se enteró de la publicación del libro de su antigua alumna: “Quienes la conocíamos de cerca sabíamos que esto acabaría pasando”. Asimismo, Marrodán alabó las grandes capacidades de escritura que ya mostraba Quintín en sus comienzos universitarios: “Rara vez se ve eso de que el profesor tenga que acudir al diccionario para buscar palabras del texto de una alumna”, aseguraba sonriente.
La joven escritora comenzó su intervención agradeciendo a sus exprofesores el haber alentado la depuración de su escritura. Empezó a escribir Dime una palabra el verano de transcurso entre el colegio y la universidad, y lo terminó durante el primer curso. Ese cambio de una etapa a otra fue un aliciente más a la hora de escribir la novela: “Muchos de los pensamientos de la novela son cosas que me había replanteado en segundo de bachiller”, señaló. Dime una palabra narra un viaje. Es una novela de ficción que refleja sus vivencias como periodista. La propia escritora reconoce el tinte autobiográfico en la novela de iniciación. Quintín quiso desvelar además el porqué del nombre del protagonista: “En principio, yo antes de nacer iba a ser un chico y me iba a llamar Pablo, así que quise hacerle ese homenaje”, dijo Marta entre las risas de los asistentes. Durante ese viaje, Pablo se va topando con numerosos personajes literarios como Ulises, Cervantes, etc. Un viaje que transcurre en varios lugares como Zaragoza, la ciudad natal de Marta, y algunos paisajes descritos con posibles referencias a Navarra.
La joven periodista de EFE reconoció que escribir la novela fue una experiencia enriquecedora: “Cuando escribes aprendes mucho, cosas que estaban en ti y que no sabías que estaban, de repente afloran. El personaje ha evolucionado a medida que avanzaba la novela y yo he evolucionado con él”, explicó. A pesar de la temprana edad a la que escribió el libro, Marta reconoce que hay gente que le reprocha tener que acudir al diccionario con frecuencia, algo que sorprende a la exalumna: “Les digo que deberían darme las gracias, creo que todo lo que sea enriquecerse es positivo”.
Marta también recordó su etapa en fcom: “Aquí es donde he aprendido, cuando eres estudiantes, eres un artesano, este es tu taller y estás para mancharte de arena hasta los codos”. Durante la ronda de preguntas contó por qué han pasado 4 años desde que concluyera la novela hasta que se publicara. “Cuando la terminé, la leyeron mis padres y ahí se quedó. Creo que todo empezó cuando me fui a Nueva York, no sé qué magia tiene pero allí hay ocho millones de personas que lo único que se preguntan es: “¿Y por qué no? Tuve la suerte de que el director del taller de teatro al que me apunté era editor; así que un día le enseñé la novela, le gustó, y decidimos publicarla”, explica. Antes de su publicación, Marta volvió a leerse la novela, a la que todavía dice sacarle algunas carencias, pero esto es algo que le reconforta: “Si la viera perfecta querría decir que yo no he evolucionado”.
Marta Quintín quiere seguir dedicándose a esto: “Sólo me entiendo haciendo esto y el haber estudiado Periodismo ha sido una forma de profesionalizarlo. Cuando no escribo lo paso fatal. Es un sufrimiento, ves delante la hoja blancos piensas que tendrías que estar haciendo algo”. Ahora mismo está escribiendo una nueva novela, menos autobiográfica y con menos tintes de ficción. Asegura no tener una rutina establecida, escribe cuando tiene un rato libre, aunque afirma que a veces le entra pereza: “Es entonces cuando me obligo a mi misma. Realmente, cuando la historia merece la pena, la acabas contando”.
Para terminar, Marta dio algunos consejos para los futuros escritores: “Son codos, hábito. La realidad al final es generosa, si te lo trabajas y tienes claro lo que quieres, es probable que lo hagas. La realidad ya se encargará de rebajar el listón, pero no lo hagáis vosotros. Hay historias en todas partes, lo que hay que hacer es encontrarlas”, concluyó la periodista.